Enquadernacions de Padeloup
“ Tot llibre rar i bell és, pel bibliòfil, un tresor que es valora segons les qualitats que presenta, ja sigui per l’especialitat de l’execució o per ser obra d’algun cèlebre artífex o bé per l’extraordinari contingut. Algunes col·leccions tenen un valor immens. A França des de fa alguns anys, els bibliòfils busquen amb molt deler les sàtires, les obres jocoses, les poesies macarróniques del segle XVI, les obres emanades de l’escola de Merlin Covaie, de Falonge i de Rabelais. També a França són molt preferits els volums enquadernats per Derosne, Padeloup, Simier, Thouvenin, i a Anglaterra les de Lervis i de Roger Payne, pagant-se per elles extraordinàries quantitats.
Es compren per sumes enormes les edicions de luxe, adornades de làmines, les impressions en paper vitel·la, amb colors, en paper verd o rosa, blau o groc, en grans o en diminutes grandàries, amb lletres d’or o amb orles. Els llibres que han pertangut a personatges cèlebres, i sobretot que tenen notes autògrafes d’aquests, són d’un valor immens per a certs afeccionats. La famosa venda Mac-Carthy, que es va fer el 1815 i el catàleg de la qual va publicar Bure, subministra molts d’aquests exemples”.
FIGUERAS, Carlos: Del amor y cuidado del libro… Ed. AGE, Barcelona, 1936, Col.lecció Los Libros Curiosos, pp. 25-26.
Enquadernació de Roger Payne
Antonio de Guevara:Edició de 1658 del Libro del eloquentíssimo Emperador Marco Aurelio con El Relox de príncipes.
““ ‘En el año 1522 pasando yo por la villa de Zafra me allegué a la tienda de un librero, el cual estaba deshojando un libro viejo de pergamino para encuadernar otro libro nuevo… dile por él ocho reales, y aún diérale ocho ducados’. Esto escribe Antonio de Guevara en 1577. Podría pensarse que es una anécdota de una época en la que el libro no merece aún ninguna consideración positiva. Pero hacia 1870 recuerda Antonio Palau el caso del mercader que separaba las antiguas cubiertas de pergamino para venderlas a los fabricantes de tambores, y destrozaba luego los libros, causando así la aniquilación de incunables y piezas desconocidas para la historia de la imprenta. Y ya entrado el siglo XX nos habla Pío Baroja en sus Memorias, del bárbaro librero que recortaba las márgenes de los libros para venderlas, por su peso, al molino de papel.
Pero si bien el recuerdo de estos Atilas del libro, de estos verdaderos ‘libricidas’ – para usar la expresión del bibliófilo uruguayo Arturo Xalambrí – concierne a los libreros, no debemos suponer que tan sólo éstos han atentado contra la integridad y la conservación de los impresos: el autor de una semblanza del destacado historiador argentino Julio Irazusta, nos ilustra sobre la peculiar bibliopatía del mismo:’… Pero había algo terrible que apenas me atrevo a contar sin fotocopias, ni Xerox, ni escáner, impensables en aquella artesanía, en esas carpetas estaban las páginas cortadas y pegadas de los libros que había utilizado y ponía como textos transcriptos. Allá iban a parar libros raros y curiosos ejemplares únicos, etc. Todo entraba en la moledora implacable de aquellas carpetas… la bibliografía más completa citada y pegada si era necesario…’.
En el otro extremo del tratamiento del libro, nos hallamos con los bibliófilos idólatras, que van desde los bibliomaníacos que calzan guantes para manipular sus tesoros bibliográficos, hasta el mero acumulador de magníficos ejemplares que no se atreve a manchar ni con la mirada, pasando por el librero que revisa los volúmenes que le importan con una navajita,con cuya afilada punta y con habilidad suma, va volviendo las hojas sin tocarlas con los dedos. Para ejemplificar los sentimientos de estos bibliomaníacos, podemos evocar esta anécdota : se cuenta de un bibliómano que en cierta ocasión dejó solo en su biblioteca a Anatole France. Cuando volvió, halló al escritor cortapapeles en mano, abriendo las páginas de un tomo de una monumental edición de Aristóteles. Echándose a llorar el bibliólatra exclamó, apesadumbrado: ‘ Qué desgracia¡ ¡ Yo tenía los veinte tomos sin abrir¡…”
Diego N. González del vlok Letraherido: http://www.letraherido.com/210402bibliofilos.htm#5